Movimiento Acción Poética

"En México las editoriales que publican poesía hacen tirajes que van de los quinientos a los tres mil ejemplares, y una barda pintada en una de las principales avenidas de la ciudad de Monterrey, puede ser leída por trescientas mil personas diariamente..."

Armando Alanís Pulido.

http://www.youtube.com/watch?v=ANZYo57uKPc

Armando Alanís Pulido es poeta y promotor cultural, además de profesor universitario. Él es el alma del Movimiento Acción Poética, considerado un fenómeno literario de carácter mural.

El Movimiento Acción Poética surge en 1996, cuando Armando Alanís se propone sacar la poesía de los libros y transmitírsela a todo aquel que paseara por las calles de Monterrey. Las actuaciones consisten en rellenar con cal un muro de entre dos y diez metros de longitud y plasmar en él una frase poética en color negro. Esta frase debe cumplir una función básica: llamar la atención para animar a la gente a la lectura. En un principio todas las frases eran producto del ingenio de Armando, pero de un tiempo a esta parte a través de las redes sociales el movimiento ha tenido una explosión de colaboradores. Además, es habitual encontrarse con citas de grandes poetas como Octavio Paz y Jaime Sabines.

La simpleza de las estructuras las convierte en puntos de extremada notoriedad, capaces de atraer las miradas de más de trescientas mil personas que a diario se desplazan por el área metropolitana de Monterrey. Todas las intervenciones, más de 3.500, llevan la firma “Acción Poética” en la parte inferior derecha. Estas paredes se han convertido un foco de atracción y turismo, llegando a ser fotografiadas por miles de estudiantes, que encuentran en la poesía una maravillosa forma de agradar a sus parejas, por el alto grado de romanticismo que desde siempre ha tenido el verso.

El Movimiento Acción Poética es considerado arte urbano y no vandalismo. En un principio sí que hubo confusiones con su finalidad si era arte o solamente contaminación visual como lo son algunos de los graffiti que jalonan la ciudad de Monterrey, pero a raíz de los primeros éxitos Armando Alanís dejó de tener problemas con los propietarios de los muros. Ha llegado a ser considerado de tal nivel cultural, que incluso desde estamentos oficiales se ha llegado a pedir permiso al autor para cubrir total o parcialmente sus actuaciones con algún fin especial como son las campañas electorales o publicidad y avisos de carácter público.

Personalmente, me parece una propuesta diferente para dar a conocer la poesía y animar a la lectura a los más jóvenes, que aunque sea por la falsa vía del graffiti callejero o simplemente por la intención de regalarles una frase bonita a sus parejas. Como manifestación pictórica es obvio que no tiene demasiado interés, pero es compensado con solvencia por su amplia función cultural y literaria.

Os invito a que paséis por el blog http://accionpoetica.blogspot.com/ para leer más información y ejemplos de sus actuaciones.